Los nuevos beneficios que las empresas están incorporando

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Publicado el 12/05/25

Estas acciones son esenciales para atraer y fidelizar talento. Tener una escucha activa para conocer lo que necesitan los colaboradores es clave para dar respuestas efectivas.

Las expectativas de los talentos van cambiando, y esto tiene un impacto directo sobre qué beneficios valoran y cómo la oferta de éstos pueda influir en la marca empleadora. Hoy las empresas deben ponerse creativas a la hora de saber qué paquetes brindan y escuchar atentamente a las necesidades de las personas.

¿Por qué decimos esto? Es que ahora ya no alcanza solo con ofrecer un salario competitivo, actualmente las empresas que quieren atraer y retener talento necesitan diseñar propuestas de valor que realmente se adapten a las nuevas prioridades de los colaboradores.

En ese contexto, los beneficios tradicionales como el seguro médico o el pago del almuerzo, si bien siguen siendo valorados, ya no son diferenciales. Lo que marca la diferencia es la capacidad de las organizaciones para ofrecer beneficios flexibles, personalizados y alineados con el bienestar integral.

¿Cuáles son los beneficios que se están incorporando hoy?

Estos son los beneficios que los colaboradores hoy están demandando, y las organizaciones ya están sumando a sus propuestas de valor:

  • Jornadas de trabajo híbridas o flexibles: es el beneficio estrella de la pospandemia. La posibilidad de combinar días remotos con días presenciales, o incluso definir tus propios horarios, ya no es un lujo, sino una demanda creciente. Las empresas que no lo ofrecen pierden competitividad al momento de atraer talento.
  • Licencias extendidas: muchas organizaciones están ampliando las licencias por maternidad, paternidad, adopción, cuidado de familiares o salud mental. Esto responde a un cambio cultural que reconoce la importancia de acompañar distintos momentos de la vida personal del colaborador.
  • Días libres adicionales o “personal days”: cada vez más compañías otorgan días extra para trámites personales, cumpleaños, voluntariado o simplemente para desconectarse. Estos gestos sencillos mejoran notablemente la percepción del clima laboral.
  • Beneficios para la salud mental y emocional: el bienestar emocional es una prioridad. Se están incorporando servicios como sesiones de terapia virtual, asistencia psicológica, mindfulness, talleres de manejo del estrés o apps de meditación.
  • Programas de capacitación y aprendizaje continuo: el desarrollo profesional es uno de los factores que más fideliza al talento. Por eso, muchas compañías están apostando por academias internas, acceso a plataformas de e-learning, convenios con universidades o programas de reskilling y upskilling.
  • Beneficios financieros personalizados: desde anticipos de sueldo y asesoramiento financiero hasta programas de ahorro e inversiones, las empresas comienzan a responder a una demanda concreta: acompañar a sus colaboradores en la planificación de su economía personal.
  • Planes de beneficios flexibles: permiten que cada persona elija los beneficios que más se ajustan a su estilo de vida, ya sea cobertura médica ampliada, suscripciones a plataformas, actividades deportivas, movilidad o guardería. Esta personalización mejora el compromiso y la percepción de valor.
  • Ofertas de bienestar integral: esta propuesta incluye desde membresías en gimnasios y clases de yoga hasta programas de alimentación saludable o asesoramiento nutricional. El bienestar físico ya forma parte de la propuesta de valor en muchas empresas.

¿Por qué sumar estos beneficios?

En el mercado actual es imprescindible ofrecer estos beneficios, y que estén especialmente diseñados para los colaboradores de cada departamento de la compañía. Hacerlo es una inversión estratégica. Atraen talento, mejoran la experiencia de los trabajadores, reducen la rotación, potencian la productividad y refuerzan la marca empleadora.

Las empresas que logren construir paquetes de beneficios alineados con las nuevas necesidades del talento no solo van a destacarse en el mercado, sino que también van a construir culturas organizacionales más humanas, sostenibles y competitivas.