Este perfil está entre los más demandados por las empresas de la región. Conoce su importancia y por qué las empresas lo necesitan
En un mundo donde la digitalización avanza a pasos agigantados, la experiencia del usuario (UX, por sus siglas en inglés) se convirtió en un factor determinante para el éxito de productos y servicios.
Lo que a los consumidores nos parece que es simplemente una aplicación intuitiva, un sitio web eficiente o una plataforma de e-commerce funcional, es mucho más que eso. Detrás de cada uno de estos desarrollos hay un equipo de especialistas en experiencia del usuario asegurando que la interacción con la tecnología sea fluida, accesible y placentera.
¿Qué hace un profesional de UX?
Se trata de un rol que se centra en diseñar experiencias digitales. Busca que todas las interacciones de las personas estén centradas en las necesidades y comportamientos de los usuarios.
Su trabajo implica investigar, analizar y desarrollar interfaces que optimicen la navegación y la usabilidad de un producto.
Por todo esto, entre sus principales responsabilidades se encuentran:
Ahora bien, ¿por qué es un puesto clave en la actualidad? Las respuestas son válidas y en todas se notan los beneficios que le brindan a las diferentes empresas, más allá de su tamaño o industria:
El futuro del UX en el mundo laboral
A medida que las empresas continúan digitalizándose, la demanda de especialistas en UX sigue en aumento. Este puesto es clave en sectores como tecnología, banca, salud y retail, donde la interacción digital con los clientes es fundamental.
Pero esto no significa que las otras industrias no tengan necesidad de talentos con conocimientos de UX. Por ejemplo, grandes empresas pueden requerir resolver temas de experiencias de usuarios internos y hasta de proveedores, que muchas veces interactúan a través de plataformas o aplicaciones, incluso para temas administrativos.
Entonces, contar con un equipo de UX no solo mejora la relación con los usuarios, sino que también impacta directamente en la rentabilidad y el crecimiento de una organización.
En un mercado en el que la experiencia es tan importante como el producto en sí, invertir en UX ya no es una opción, sino una necesidad.